martes, 16 de diciembre de 2008

DE AQUELLOS LODOS ESTOS BARROS

La sociedad española ha dado un vuelco espectacular desde que yo nací en los 60, hemos alcanzado la democracia, tenemos derechos sindicales y políticos, surgen nuevos retos como la inmigración. En cuanto a la escuela y el instituto no deberíamos quejarnos pues están plenamente profesionalizados; no se pega a los alumnos como en mi época, en algunos casos más bien al contrario.
¿Pero como surge el problema de la violencia juvenil? De los malos ejemplos del hogar en la mayoría de los casos, a los hijos se les deja a solas con la televisión y las videoconsolas e Internet les damos casi cualquier capricho y lo que no obtienen por las buenas lo persiguen alcanzarlo por las malas.
Yo me considero un observador de la vida y de todo lo que llevo visto hasta este momento en el plano educativo y familiar, que es el que en definitiva siempre marca al ser humano no estoy en absoluto de acuerdo con las modernas teorías de los psicólogos infantiles, hasta se puede encarcelar a unos padres por dar una chaparreta correctiva a un hijo ¿Cual es entonces la raíz del problema de la violencia infantil y juvenil? Yo creo que no es la violencia en si misma, los niños de los 60 y 70 jugábamos a ser vaqueros, soldados, arqueros, etc., que en principio también serian juegos violentos. En lo que si coincido con los especialistas es que tanto la videoconsola como Internet mal empleados son un peligro, porque muchas veces los padres se dejan llevar por los hijos y les compran videojuegos que no corresponden a su edad y son de una violencia extrema. Hablemos por ejemplo de los móviles con cámara o videocámara que cada vez a edad más temprana se les obsequia a los menores, con la excusa de tenerlos controlados ¿Pero cual es el resultado? Un efecto contrario pues en la actualidad entre otros terribles usos, se usan para grabar peleas y palizas, así como para actos delictivos y no contentos con ello a renglón seguido lo cuelgan en la red. Al niño por desgracia no se le educa en casa en los valores de la democracia, la tolerancia, la paz, la convivencia y el progresismo, en la mayoría de los casos nos encontramos con que los padres bien sea por falta de tiempo, por desidia o bien por que consideran que un niño no tiene la suficiente altura intelectual como para comprender ciertos valores.
Craso error amigos lectores y de este patinazo parten en su mayoría los problemas de la violencia infantil y juvenil, por no hablar del botellón, que llega a partir de la adolescencia. También debemos reseñar un punto fundamental que al menos el que suscribe no comprende y se niega a comprender y es esa moda que surgió de unos 10 años hasta hoy en día y es la de dejar que los menores se acuesten cada vez más tarde.
Esta fea costumbre se da tanto en días laborables como en el fin de semana, si queridos lectores, han leído bien los fines de semana hay muchos menores de obligados acompañantes de sus padres y amigos de estos de jarana hasta altas horas de la madrugada y no me refiero a adolescentes, que ese es otro tema, sino a niños de corta edad y bebes. Asistiendo al visionado de una película en los multicines Yelmo Cineplex en el centro comercial Los Rosales, cual no seria mi sorpresa al observar a una madre, viendo la película con su bebe en brazos y claro como los bebes son muy sensibles a los ruidos, la criatura no paraba de llorar y la madre no hacia mas que entrar y salir.
Sin embargo ya algo parecido había sucedido en el visionado de una película en los cines Filmax en el centro de ocio del puerto, sobre las 11.30 horas de la noche, cuando una criatura de 3 años no hacia más que quejarse, con razón, a su padre de que tenia sueño y quería irse a la cama a dormir; el público por su puesto, como no podía ser menos le recriminamos al padre la falta de respeto hacia su hijo al privarle del sueño a semejantes horas, su violenta respuesta no se hizo esperar, le propino un par de collejas y le tiro del pelo para acallar sus quejas, “vaya comportamiento más ejemplar para un padre” y no solo esto sino que los padres muchas veces se comportan como sus hijos cuando se supone que tienen más sentido común que ellos, pues una simple discrepancia por un sitio para aparcar o salir de un aparcamiento cuando hay atasco genera una reacción enormemente violenta que no dudan en emplear delante de sus hijos, sin embargo acusan a los centros educativos y por ende a maestros y profesores, en general a todo el sistema educativo, de todos sus males, cuando el problema realmente empieza en casa, por que no se puede nadar y guardar la ropa, la educación de los hijos es tarea primordial de los padres, por ello luego no esgrimamos aquello tan manido, de que de aquellos lodos estos barros, seamos responsables y cojamos el toro por los cuernos, ser padres requiere grandes sacrificios y renuncias, por lo tanto la educación comienza y termina siempre en el seno de la familia. Si a lo largo de la vida adquirimos conocimientos y experiencia que la persona va adquiriendo y que por su puesto le marcaran su vida pero al final todo vuelve al principio padres, madres e hijos es el círculo alrededor del que gira la humanidad.

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